Bibliotecas digitales: principales beneficios para la comunidad universitaria
Es un hecho, los estudiantes universitarios leen cada vez más en formatos digitales. Por un lado, el alto costos de los libros que, de acuerdo a un reporte de Kitaboo, ha aumentado más de 1000% en los últimos 30-40 años. Por el otro, la aparición de las bibliotecas digitales ha garantizado una mayor accesibilidad, además de formatos interactivos que facilitan el aprendizaje. Siendo las universidades parte fundamental de la educación, así como centros de investigación, cultura y desarrollo, es necesario implementar bibliotecas virtuales universitarias que permitan a alumnos, profesores, investigadores y a cualquier ciudadano acercarse al conocimiento en los términos actuales.
¿Qué es una biblioteca digital y cómo beneficia a las universidades?
De acuerdo al Manifiesto de las IFLA/UNESCO Sobre las Bibliotecas Digitales (actualizado en 2013), “una biblioteca digital es una colección en línea de objetos digitales de buena calidad, creados o recopilados y administrados (…) que se ponen a disposición de manera coherente y perdurable y con el respaldo de los servicios necesarios para que los usuarios puedan encontrar y utilizar esos recursos”. En este mismo documento, se establecen entre objetivos de las bibliotecas digitales promover la digitalización, el acceso y la preservación del patrimonio cultural y científico; brindar acceso a todos los usuarios a los recursos informativos acopiados por las bibliotecas, respetando los derechos de propiedad intelectual, entre otros.Las premisas de este Manifiesto tienen consonancia con los Objetivos y metas de desarrollo sostenible para 2030 propuestas por la Organización de Naciones Unidas (ONU), donde el “acceso igualitario de todos los hombres y las mujeres a una formación técnica, profesional y superior de calidad, incluida la enseñanza universitaria” es una de las bases.En estas metas también se hace un llamado a “eliminar las disparidades de género en la educación y asegurar el acceso igualitario a todos los niveles de la enseñanza y la formación profesional para las personas vulnerables”.
Ventajas de las bibliotecas virtuales
La implementación de bibliotecas virtuales de universidades como meta para el futuro, no se trata solo de una propuesta de la ONU. Un plan para tu biblioteca digital puede beneficiar a las instituciones, así como a toda la comunidad académica, en distintas formas.
- Menos espacio y menor mantenimiento: Miles de libros pueden ser almacenados en un solo dispositivo; esta cifra se multiplica exponencialmente gracias al almacenamiento en la nube. De igual forma, es mucho más fácil y económica el mantenimiento de una biblioteca virtual.
- Sin límite de usuarios: Una biblioteca tradicional solo puede hacer tantos préstamos de una obra como ejemplares impresos tenga en su archivo. Sin embargo, las bibliotecas digitales universitarias permiten que un gran número de alumnos puedan acceder a una obra de manera simultánea.
- Acceso 24/7, desde cualquier lugar: Al contar con tu propia biblioteca digital, los estudiantes no tendrán límites de horario o de ubicación para revisar tu catálogo. Con solo conectarse en línea, lo tendrán a su entera disposición.
- Uso de textos enriquecidos: Las publicaciones digitales no solo “se leen”; al menos no solo de la forma tradicional. Puedes complementar los textos con videos, infografías, audios, galerías, juegos y otro tipo de recursos que refuerzan el aprendizaje.
- Disminución de costos: En ocasiones, la publicación de textos propios de una universidad se ve limitada por los elevados precios que implica la impresión. Con una biblioteca digital es posible disminuir este gasto enormemente, además de poder compartir en menor tiempo la obra con la comunidad académica.

¿Cómo usar una biblioteca digital dentro de una institución?
Si aún estás explorando posibilidades y no tienes claro qué usos le puedes dar a una biblioteca virtual dentro de tu universidad o instituto, puedes considerar estas alternativas.
- Crear una colección digital propia: Clasificar y organizar tu inventario en formato digital es una gran ventaja que hará mucho más fácil la consulta de los alumnos. Además, podrás incorporar todo el material producido por la propia institución.
- Conocer lo que están leyendo los alumnos: Si decides crear tu biblioteca virtual en plataformas como publica.la, recibirás valiosas métricas que te permiten conocer el comportamiento de los lectores. Así podrás saber cuánto y qué libros están leyendo los alumnos.
- Hacer una actualización constante: Ahora es posible publicar inmediatamente todo el material de investigación que se publique en tu universidad, o en instituciones aliadas. De esta manera, estarán a la mano las últimas tendencias y descubrimientos para tus lectores.
- Fortalecer programas de Educación a distancia: Es clave asegurarse que los programas a distancia tengan mayor accesibilidad a recursos para los alumnos que estudian bajo esta modalidad. Con una biblioteca virtual, pueden contar con materiales valiosos, pero como institución también puedes hacer un mejor seguimiento a su actividad dentro de la plataforma.
- Tener educación inclusiva: Las nuevas tecnologías acercan a la literatura, y a las bibliotecas en general, a las personas con discapacidades, teniendo una educación más inclusiva. Por ejemplo, alguien con deficiencia visual podrá disfrutar los títulos a través de audiolibros o manejarse de manera autónoma gracias a ciertos software que facilitan su navegación.
- Resguardar el archivo físico: Muchos libros en las bibliotecas datan de hace décadas, o son ejemplares únicos, por lo que su manejo es delicado y un uso constante puede significar la pérdida del mismo. Una forma de resguardar el patrimonio es la digitalización, para que los estudiantes puedan consultarlos sin restricciones o cuidados adicionales.
Biblioteca física y biblioteca virtual: ¿cómo pueden convivir en la universidad?
Son muchos los ejemplos exitosos de universidades que han desarrollado bibliotecas digitales, que permiten un acceso libre a sus archivos, y que mantienen la convivencia con la biblioteca física. Un caso representativo es la Biblioteca Bodleiana en Oxford.La biblioteca, con más de 400 años de historia, mantiene su colección de libros, pero ha recibido las nuevas tecnologías para complementar su actividad. Para ello, se desarrollaron programas como: Legal Deposit Libraries Act of 2003, electronic Legal Deposit y Search Oxford Libraries Online. Estos programas ofrecen ciertos servicios a los usuarios, entre los que se incluyen la consulta en línea y el acceso a colecciones más amplias que las que ya se encuentran dentro del edificio, con las que se han complementado los libros físicos con materiales digitales y electrónicos.

Ahora las bibliotecas pueden ser centro más dinámicos, donde constantemente se accede a información que, además, es actualizada con cierta frecuenta. Pero siempre con la posibilidad de revisar las obras originales que a veces es mandatorio para ciertas investigaciones. ConclusiónLas universidades deben reinventarse para satisfacer las necesidades educativas incorporando métodos de enseñanza para el futuro. Uno de ellos son las bibliotecas digitales universitarias, que abren un mundo de posibilidades para los estudiantes, profesores y todo el que hace vida en el entorno académico.Una biblioteca virtual ofrece la oportunidad de resguardar el acervo de la institución, al mismo tiempo que garantiza una mayor accesibilidad. Son muchas las aplicaciones que tiene dentro de la dinámica universitaria; esto, sin necesidad de prescindir en ningún momento de la biblioteca física.